Es muy común y recurrente en los emprendedores pensar que, para emprender requieren una cantidad ilimitada de recursos monetarios pero, no es así, en la actualidad existen distintas formas para materializar tu idea de negocio y el día de hoy vamos a poner a prueba las tiendas en línea.
Para comenzar vamos a definir que una tienda en línea es una aplicación web que te permite comprar (si eres cliente) y vender (si eres emprendedor) productos o servicios por internet, entonces ¿cuáles son los pros de utilizar éste mecanismo de ventas?.
- No requieres de tener una tienda física para realizar las ventas de tu producto o servicio.
- El monto de inversión está muy por debajo de otra formato de venta como la tienda física, la venta por catálogo (siempre y cuando el catálogo no sea virtual), la generación de fuerza de venta, entre otros.
- Mantener actualizada tu tienda en línea es muy sencillo y lo puedes realizar desde la comodidad de tu hogar.
- No es necesario estar pendiente de la tienda 24 horas del día, gracias a esto puedes realizar otras actividades productivas a la par.
- Puedes trabajar desde casa, lo cual implica que reduces costos como el transporte, comidas, etc.
- Tu tienda en línea te puede generar las estadísticas necesarias para la toma de desiciones del negocio, pues te proporciona horarios de compra de los clientes, lugares de dónde te compran, consumos promedio, tiempo que pasan en la tienda virtual, etc.
- Usando herramientas complementarias de redes sociales, puedes generar el marketing adecuado para tu producto o servicio, lo cual implica un ahorro en estrategias de marketing que en ocasiones no funcionan como los volantes o flyers.
- Te permite crear una base de datos para enviar ofertas a los clientes.
- El chat de las tiendas en línea te permite estar en contacto con los clientes y concretar un mayor número de ventas desde tu celular o computadora.
Ya te he hablado de la parte maravillosa y funcional, pero ahora es momento de hablar sobre las partes no tan agradables de las tiendas en línea.
- El posicionamiento de tu tienda en línea te va a llevar tiempo, pues en la actualidad existe desconfianza de la veracidad y existencia de los negocios en línea.
- Las personas prefieren ver y tocar los productos antes de comprarlos para verificar que sean de su total agrado.
- El sistema de pago en línea no es de la total confianza de los clientes y, en ocasiones prefieren realizar depósitos en efectivo.
- Requieres de un proveedor de envíos para poder hacerle llegar los productos al cliente, esto no aplica para los emprendedores que ofrecen servicios.
Como puedes darte cuenta existen más pros que contras, así que puedes considerar a las tiendas virtuales como una opción muy viable para comenzar la idea de negocio que tienes entre manos.